Mayra Gómez Kemp,
la nueva presentadora del «Un, dos, tres...»

Después de la terrible caída que Kiko Ledgard había sufrido en 1981 al resbalar desde una altura de siete metros, su recuperación no fue posible. Todos confiaban en que se restablecería del todo y volvería a ser el mismo hombre dicharachero y dinámico de siempre, pero lo cierto es que no fue así.

Cuando Narciso Ibáñez Serrador decide volver a poner en marcha el «Un, dos, tres...» se le realizó una prueba a Kiko para ver si estaba en condiciones de volver a presentar el concurso, pero el entrañable presentador peruano ya no contaba con los reflejos y la memoria que le caracterizaban.

Se imponía necesariamente la sustitución; una sustitución que en principio se anunció como temporal, hasta que Kiko Ledgard se recuperara del todo, pero que Chicho Ibáñez Serrador sabía que era definitiva.

Varios nombres se barajaron, todos ellos masculinos: Raúl Sénder, Emilio Aragón, y, sobretodo, Chicho Gordillo, quien llegó a firmar el contrato definitivo para presentar el «Un, dos, tres...». Pero a pocas semanas de empezar a grabar decidió renunciar a su puesto, dada la amistad que le unía con Kiko Ledgard y que no quería traicionar ocupando su lugar.

Chicho Gordillo renunció a presentar «Un, dos, tres...»

Ibáñez Serrador decidió cortar por lo sano y dar un giro de ciento ochenta grados sorprendiendo a propios y extraños, eligiendo como presentadora a una mujer: Mayra Gómez Kemp, quien precisamente había debutado en «Un, dos, tres...» como actriz de la subasta.

Era la primera vez que un concurso de prime time lo iba a presentar una mujer, no sólo en España, sino en el mundo entero. Muchos auguraron un estrepitoso fracaso, y llamaban a casa de Mayra para persuadirla de presentar el «Un, dos, tres...», ya que iba a suponer un frenazo en su meteórica carrera. Sólo Narciso Ibáñez Serrador y Alberto Berco, el marido de Mayra, confiaron en ella.

Alberto Berco, en la foto junto a Luisa Armenteros, acompañaba a Mayra en las grabaciones

Mayra Gómez Kemp arriesgó y ganó. Y aunque al principio las comparaciones con Kiko Ledgard fueron inevitables, pronto se ganó el cariño y admiración de todos los espectadores, convirtiéndose en la presentadora más popular y de más éxito de la televisión; el público la galardonó con el Premio TP a la mejor presentadora en 1982.

En este vídeo vemos la primera bajada que hizo Mayra Gómez Kemp por las escaleras del plató del «Un, dos, tres...» y sus primeras palabras a los espectadores.

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