En un primer momento se pensó en los humoristas “Martes y 13” para el papel de “Tacañones”, lo cual daría un giro surrealista y más cómico a la parte negativa del «Un, dos, tres...».

Pero tras la negativa de Chicho Gordillo a ser presentador el programa y la elección de Mayra Gómez Kemp para ese puesto, Narciso Ibáñez Serrador consideró que lo mejor sería dejar todo el concurso en manos de mujeres; así que frente a la presentadora y las azafatas puso a “las Tacañonas”.

“Las Tacañonas” estaban interpretadas por las hermanas Hurtado. Paloma hacía el papel de “la viuda de Poco”, Fernanda era “la Seño”, y Teresa “Mari Puri”.

La “viuda de Poco” era la mayor de las tres, ya que las otras dos sólo tenían “diecisiete” añitos; o al menos eso es lo que pretendía ella hasta que se casaran. Su misión era que no se dilapidara el dinero. Casada con don Anselmo Poco, aunque por poco tiempo -sólo cinco horas-, pretendía que el que intentara llevarse alguna peseta del programa, fuera con los “pies paʼ lante”.

“La Seño”, en realidad se llamaba Inmaculada, y decidió encarrilar sus pasos hacia la enseñanza, y era la maestra de la escuela de Tacañón del Todo.

“Mari Puri” vestía de azul purísima y su misión era cortar cualquier inconveniencia, cualquier palabra malsonante, cualquier destape... Mari Puri se escandalizaba al ver minifaldas o cualquier síntoma de frivolidad.

Los personajes de “las Tacañonas” tuvieron tanto éxito entre el público que las Hurtado ganaron el Premio TP a los personajes más populares en 1982.