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“Resumen de la cuarta etapa”

3 de mayo de 1985

 

 

 

«Un, dos, tres...» - 1985

 

 

 

La subasta comenzó con la reposición del número musical del programa dedicado al aeropuerto (30 de noviembre de 1984), que, a juicio del equipo de «Un, dos, tres...», había sido uno de los más originales de toda la etapa.

 

«Un, dos, tres...» - 1984

 

 

En este vídeo vemos aquel número musical.

 

 

 

El regalo procedente de este primer número fue una maqueta de avión cuya tarjetita decía....

 

En los primeros años de la aviación volar era toda una aventura; y una aventura peligrosa. Si a ustedes les gusta la aventura no deben rechazar este regalo.

 

 

 

La siguiente actuación fue la de Arévalo, que se acercó a la mesa de Mayra para contar alguno de sus chistes.

 

En este vídeo vemos la intervención de Paco Arévalo en este programa.

 

 

 

Arévalo dejó en la mesa una chistera, cuya tarjetita no fue leída por Mayra.

 

La siguiente actuación se desarrolló en el decorado, y fue la de Vicky Larraz cantando “Tengo que llegar”, canción incluida en el LP “El show del «Un, dos, tres...»”. El regalo no podía ser otro que el disco del programa.

 

 

 

La tarjetita de la chistera de Arévalo decía lo siguiente:

 

Es lógico que si a Arévalo se le conoce por sus chistes, nos haya dejado una chistera.

 

 

Y la tarjetita del disco decía:

 

En el nuevo disco “El show del «Un, dos, tres...»” figura esta canción, “Tengo que llegar”, que confiamos se haga popular.

 

  

El primer regalo que dejaron los concursantes fue la chistera de Arévalo, cuya tarjetita terminó de leer Mayra en su totalidad:

 

Es lógico que si a Arévalo se le conoce por sus chistes, nos haya dejado una chistera.

 

Pero una chistera se luce cuando los hombres se visten de gran gala. Hablando de galas, sin duda alguna el regalo de gala de nuestro programa es ¡este coche!

 

 

En este punto se hizo una pausa para la publicidad; a la vuelta pudimos ver la actuación de Pepe Da Rosa con una canción sobre la serie «V». El regalo fue un lagarto con una tarjetita que decía:

 

La serie «V» se ha hecho muy popular, pero hay niños que les temen a los lagartos invasores, sin pararse a pensar que los lagartos, los auténticos lagartos, son inofensivos animales a los que les encanta tomar el sol.

 

 

A Montse y Eduardo no les hizo ninguna gracia este regalo y lo rechazaron enseguida:

 

La serie «V» se ha hecho muy popular, pero hay niños que les temen a los lagartos invasores, sin pararse a pensar que los lagartos, los auténticos lagartos, son inofensivos animales a los que les encanta tomar el sol.

 

Hablando de tomar el sol, para que ustedes logren la felicidad, ¡arriba, chicas! aquí tienen un precioso lagarto y una lámpara solar para hacer feliz al lagarto.

 

 

La siguiente actuación fue la de Beatriz Carvajal, en el papel de “Gafancia”. El regalo que dejó en la mesa fueron las cartulinas verdes que se utilizaban para los regalos de la subasta. La tarjetita decía:

 

En este programa dedicado a resumir lo que ha sido el «Un, dos, tres...» durante estos últimos seis meses no podía faltar algo clásico en nuestro programa: las tarjetas verdes que yo leo y escribe el jefe tratando de orientarles a ustedes sobre lo que puede ser cada regalo.

 

 

Montse y Eduardo dejaron el avión, cuya tarjetita completa decía....

 

Mejor lo vemos en este vídeo:

 

 

 

Tras perder este viaje, Mayra dio paso a la reposición de uno de los números musicales del programa dedicado a Roma (11 de enero de 1985). El regalo fue una cesta cuya tarjetita decía:

 

Casi todo lo que en la Italia de hoy es típico, ya era conocido en la antigua Roma.

 

 

Los concursantes rechazaron inmediatamente este regalo, que escondía en su interior lo que leyó Mayra:

 

Casi todo lo que en la Italia de hoy es típico, ya era conocido en la antigua Roma.

 

Casi todo era conocido... pero hay algo muy italiano que no pudieron probar ni los mismísimos emperadores, ya que aún Marco Polo no lo había traído desde China a Italia. Nos referimos a la pasta. Si ustedes gustan de la pasta hubieran quedado satisfechos con el regalo que han perdido. ¡Arriba, chicas! ¡Todos estos tortellini, macarrones, espaguetis, etcétera, etcétera!

 

Pero además de pasta, para que éste sea un regalo digno de la antigua Roma también le hubiera correspondido otra pasta... Hablo de ¡un millón de pesetas!

 

 

En un programa que gira en torno al propio «Un, dos, tres...» no podía faltar la magia; y ya sabemos que cuando en «Un, dos, tres...» se habla de magia, nos viene un nombre a la cabeza: Juan Tamariz.

 

En este vídeo vemos la actuación de Juan Tamariz.

 

 

 

El regalo de la actuación de Tamariz fue un cubo mágico, cuya tarjetita decía:

 

Como ustedes pueden ver, aparentemente en este dado no hay nada, pero no olviden que se trata de un dado mágico y, por tanto, en él puede aparecer o desaparecer cualquier cosa: un pañuelo de colores, unas flores, o ¿por qué no? un conejo.

 

 

Montse y Eduardo dejaron este regalo. Y perdieron...

 

En este vídeo vemos a Mayra hacer un pase mágico y anunciar a los concursantes el regalo que habían perdido.

 

 

 

En un último programa como éste, alguien sensato y con verbo fácil debía decir unas palabras de despedida; no podía ser otro que Antonio Ozores, que desde el balcón de Tacañón del Todo lanzó un mensaje “muy claro”.

 

«Un, dos, tres...» - 1985

 

 

El regalo de esta actuación fue la banda de alcalde que llevaba puesta Antonio Ozores; su tarjetita decía:

 

Antonio Ozores, que además de serlo, tiene aspecto de distinguidísimo caballero, se ha encargado del discurso de clausura de nuestro programa.

 

 

Los concursantes decidieron descartar este regalo, cuya tarjetita completa decía:

 

Antonio Ozores, que además de serlo, tiene aspecto de distinguidísimo caballero, se ha encargado del discurso de clausura de nuestro programa.

 

Si a ustedes les gusta viajar, están de enhorabuena, ya que como en nuestro programa todo guarda relación, les hubiera correspondido un viaje que tiene que ver con la clausura, dado que hubieran podido realizar una ruta turística por seis conventos de clausura españoles, viéndolos desde fuera, claro.

 

 

En este momento se hizo una pausa para la publicidad y Mayra Gómez Kemp, a la vuelta, nos sorprendió con una actuación inolvidable: ella cantando el “Nos volveremos a ver”. Pero como ella misma reconoció, era una canción un poco triste, así que dio paso al humor con una actuación de Fernando Esteso versionando una canción de Julio Iglesias.

 

Su regalo fue una foto suya; la tarjetita decía:

 

Acabamos de ver a Fernando Esteso, comprobando una vez más que se trata de un gran artista que juega con el humor, canta e imita a las mil maravillas. Y como este regalo tiene que ver con quien nos lo ha dejado, para saber de qué se trata tienen que completar la frase: “Han ganado ustedes este so...”.

 

 

No les gustó a Montse y Eduardo este juego de palabras, así que descartaron el regalo de Fernando Esteso; la tarjetita se completaba con el siguiente texto:

 

“Han ganado ustedes este so...”; en este caso han perdido... ¡arriba, chicas! ¡Este so...lomillo!

 

 

La última actuación de la noche fue la repetición de otro número musical; el del programa dedicado al mundo del espectáculo (25 de enero de 1985).

 

«Un, dos, tres...» - 1985

 

 

El regalo fue la chistera que había usado Kim en el número. El regalo era un juego relacionado con unas botellas de cava.

  

Estando en los tres últimos regalos de la noche, Mayra quiso ser buena con los concursantes y les advirtió que ni en el disco del programa, ni en las tarjetas que había dejado “Gafancia”, estaba el Chollo. Los concursantes decidieron, entonces, decantarse por el juego, dejando los otros dos regalos.

 

La tarjetita de las cartulinas verdes decía:

 

En este programa dedicado a resumir lo que ha sido el «Un, dos, tres...» durante estos últimos seis meses no podía faltar algo clásico en nuestro programa: las tarjetas verdes que yo leo y escribe el jefe tratando de orientarles a ustedes sobre lo que puede ser cada regalo.

 

Hablando del jefe, a través del texto de las tarjetas orienta hacia lo que puede ser el regalo, pero a veces los concursantes se desorientan. En cabio, en el mundo animal existen unos seres que tienen un excelente sentido de la orientación, las hormigas, que, por si ustedes no lo sabían, son para algunos un delicadísimo manjar; y eso es lo que les hubiera correspondido. ¡Arriba chicas! ¡Todas estas latas de exquisitas hormigas fritas!

 

 

Y el texto de la tarjetita del disco de “El show del «Un, dos, tres...»” decía:

 

En el nuevo disco “El show del «Un, dos, tres...»” figura esta canción, “Tengo que llegar”, que confiamos se haga popular.

 

“Tengo que llegar” es, como hemos oído, el problema de las muchachas que desean trabajar con nosotros. Pero un problema mucho más común es el de las amas de casa cuando tienen que llegar a fin de mes. Para que ustedes hubieran podido llegar con toda comodidad acaban de perder ¡la cesta de la compra para seis personas y todos los gastos de electricidad, gas, teléfono, agua y arbitrios municipales desde hoy hasta fin de año!

 

 

El regalo final estaba en manos de la suerte que tuvieran los concursantes con el juego.

 

En este vídeo vemos el desarrollo de la subasta y el premio que se llevaron Montse y Eduardo.

 

    

 

 

  

El programa terminó, como no podía ser de otra manera, con una despedida de Chicho. Sorprendente, irónica e ingeniosa, como siempre.

 

En este vídeo vemos esa despedida.

 

 

 

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