PRIMERA ETAPA
(1972-1973)
En la primera etapa de «Un, dos, tres... responda otra vez» (1972-1973) el plató no tenía puertas laterales por donde salieran los cómicos o se presentaran los regalos. Esas puertas estaban en la parte principal del decorado. De hecho, antes de que los programas fueran temáticos, Kiko Ledgard en la subasta ofrecía a los concursantes los regalos que se escondían tras una cortina y unas puertas numeradas en las que se apostaban las azafatas para llevar los regalos a la mesa.
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Cuando los programas comenzaron a ser temáticos, las puertas, que seguían siendo numeradas, quedaron integradas en el decorado específico que se preparaba para cada ocasión.
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La evolución del programa condujo a que las puertas de los regalos ya no estuvieran numeradas sino que fueran también temáticas; así, por ejemplo, en el programa dedicado al teatro (11 de septiembre de 1972) cada puerta era una obra de teatro (“Romance de lobos”, “Fausto” y “Los persas”).
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En otros programas, cada puerta era un elemento relacionado con el tema de la noche; por ejemplo, en el programa dedicado a la caída del Imperio Romano (9 de octubre de 1972) había una puerta de las fieras y otra de los gladiadores, o en el programa dedicado al terror (4 de diciembre de 1972) hubo puertas dedicadas a las brujas, los fantasmas y los vampiros.
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SEGUNDA ETAPA
(1976-1978)
Ya en la segunda etapa de «Un, dos, tres... responda otra vez» (1976-1978) ya hubo puertas laterales por las que a veces aparecían los cómicos de la subasta, pero que normalmente servían para esconder los regalos a que los concursantes optaban.
En la puerta se situaban dos azafatas que abrían ambas hojas de la puerta cuando Kiko Ledgard anunciaba el regalo perdido o ganado por los concursantes.
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Las puertas guardaban la estética de todo el plató, siendo blancas con dibujos en negro, tanto en el interior como en el exterior.
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El plató tenía dos puertas, una situada en el lado derecho según se veía desde la grada, que era la puerta que más veces se veía en pantalla porque era la que estaba en el tiro de la cámara que recogía el movimiento de la azafata que se acercaba desde el decorado.
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La otra puerta estaba en el lado izquierdo del plató (visto desde la grada) y por ella salían los coches para dirigirse al centro del decorado.
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TERCERA ETAPA
(1982-1984)
En la tercera etapa de «Un, dos, tres...» (1982-1984) existía una entrada lateral al fondo con una cortina por donde aparecían los cómicos y los artistas invitados.
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Al lado de esa entrada había una puerta en tonos grises con decorada con cajas de regalos y unos números 1, 2 y 3 con la estética de aquella etapa. Esa puerta, flanqueada por dos azafatas, escondía los regalos que los concursantes perdían o ganaban en la subasta.
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Delante de esa puerta, en la segunda parte de esta tercera etapa se situaba el panel del juego de Botilde.
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Al lado izquierdo del plató visto desde la grada se situaba otra puerta lateral igual que la derecha por la que salían los coches hacia el decorado.
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