Madonnas de figuración

El programa dedicado al erotismo (6 de noviembre de 1992) comenzó con un desfile en el que pudimos ver diversos iconos eróticos de todas las etapas históricas de la Humanidad.

Como símbolos eróticos de la sociedad post-moderna aparecieron unas chicas vestidas de Madonna.

“Cheersleaders” acompañando a “McRoyo”

El personaje de “McRoyo‘ siempre hacía sus apariciones en las subastas de la séptima etapa de «Un, dos, tres...» (1991-1992) precedido por unas chicas que anunciaban su llegada gritando su nombre y aireando sus pompones.

Las calladas acompañantes de los cómicos

Los humoristas de la subasta de «Un, dos, tres...» solían realizar sus actuaciones acompañados por chicos y chicas de figuración, vestidas de forma acorde al personaje que estuviera representando el cómico, y que servían para ambientar mejor su intervención.

La chica que aparece en esta foto es Esther del Prado, que con tan sólo 16 años comenzó a trabajar en «Un, dos, tres...» como figurante. Cierta mañana se presentó en el despacho de Narciso Ibáñez Serrador y le dijo: “Necesito trabajo”. Chicho se quedó impresionado ante tanta naturalidad y la contrató.

Esther llegó a ser azafata suplente en algunos programas, como el del ajedrez o la fotografía, entre otros.

Chicas en el antiguo Egipto

En la foto vemos a varias chicas de «Un, dos, tres... ¡a leer esta vez!» (2004) terminándose de caracterizar como egipcias para intervenir en el programa dedicado a “No digas que fue un sueño” (16 de abril de 2004).