En defensa de la cultura

El único “tacañón” que estuvo en todos los programas de la segunda etapa de «Un, dos, tres... responda otra vez» (197-1978) fue el “profesor Lápiz”, personaje interpretado por el actor Pedro Sempson, y cuya misión era defender la cultura, de modo que ante cualquier error de los concursantes detenía el tiempo y les corregía utilizando un pareado.

Controlando la economía del programa

Como su propio nombre indica, los “tacañones” tenían como misión que los concursantes ganaran el menor dinero posible; y especialmente controlador de esta cuestión era el personaje de “don Rácano”, interpretado por el actor Paco Cecilio. Este personaje, “don Rácano jr.” era hijo de “don Rácano”, un terrateniente de “Tacañón del Todo” cuyas posesiones se alargaban desde el Cantábrico hasta el Mediterráneo.

La salvaguarda de las buenas costumbres

El personaje que interpretaba Juan Tamariz era “don Estrecho”, que se encargaba de velar para que en el programa se respetaran las buenas costumbres y el decoro. Chicho Ibáñez Serrador quería con este personaje ridiculizar a la censura, y por eso, entre su atuendo, le entregó unas grandes tijeras para “cortar” los guiones en aquella parte que no fuera decorosa.

Este fue el primer “tacañón” que causó baja, siendo sustituido por el personaje de “don Justo Rajatabla” interpretado por Blaki.

El último en llegar

El personaje de “don Menudillo” fue el último “tacañón” en llegar a la segunda etapa de «Un, dos, tres... responda otra vez», incorporándose al programa en sustitución de “don Rácano” después de las vacaciones de verano de 1977, en el programa dedicado al maestro Serrano (7 de octubre de 1977).

Pero esa no fue la fecha en la que se incorporó al programa el actor que le daba vida, Luis Lorenzo, ya que el cómico ya formaba parte de la plantilla de «Un, dos, tres...» anteriormente, interpretando diversos personajes en la subasta.