Los exámenes de septiembre

7 de septiembre de 1987

La subasta comenzó con un número musical con una cuidada coreografía, protagonizado por Silvia Marsó y Kim Manning, apoyadas por Isabel Serrano y todas las chicas del ballet.

En este vídeo vemos el número musical con el que se abría la subasta.

Tras este número musical, Arévalo bajó la escalera del plató interpretando a un aspirante a aprobar el carnet de conducir al que habían suspendido en 30 ocasiones. Le acompañaban las dos chicas que normalmente aparecían detrás de él en sus intervenciones.

Como era habitual en los programas de la sexta etapa, Chicho Ibáñez Serrador intervino desde el control de realización para dar paso al vídeo del programa japonés «Endurance».

Como sabemos, se emitían imágenes de las pruebas a las que sometían a los concursantes japoneses para demostrar que las eliminatorias del «Un, dos, tres...» no eran tan duras como había dicho algún crítico de televisión.

En esta ocasión, los concursantes de «Endurance» tenían que meter la cabeza por un agujero que conducía a un túnel de cristales en cuyos extremos se encontraban dos feroces lagartos. Los animales, al ver la cabeza del concursante, se acercaban a él con la intención de morderle. El concursante que permitiera que los lagartos se le acercaran más a su su cabeza antes de sacarla del túnel ganaba la prueba.

El segundo humorista que intervino en la subasta fue Raúl Sénder, interpretando al “Titi”, un chuleta madrileño.

En el apartado de invitados, el «Un, dos, tres...» contó en esta ocasión con la visita de Luis Díez Jiménez, que presentó el libro “Antología del disparate”, en el que recoge anécdotas, curiosidades, respuestas absurdas y disparates escritos por sus alumnos en los exámenes.

Juan Rosa y Manolo Sarriá, del “dúo Sacapuntas”, volvieron a aparecer una semana más caracterizados de toreros, lo que provocó la sempiterna pregunta de Mayra sobre qué relación tenían unos toreros con los exámenes de septiembre.

La actuación del “dúo Sacapuntas” provocó las carcajadas del público; lo puedes comprobar en este vídeo.

Para terminar la subasta, Nina, que no había participado en el número musical anterior, protagonizó un número en solitario, en el que demostró una vez más su extraordinaria voz.

El número trataba sobre el fin de la carrera universitaria y el enfrentarse a la vida. La música era del “I will survive” de Gloria Gaynor.

En este vídeo vemos la actuación en solitario de Nina.

Llegados a los tres últimos regalos de la noche, Mayra realizó la llamada a la sufridora en casa, que tuvo la fortuna de ganar un viaje a Río de Janeiro, que Diana y Juan Carlos perdieron al desechar el volante que dejó en la mesa Arévalo.

Los concursantes no tuvieron buen ojo eligiendo el regalo y a pesar de la tentadora oferta de Mayra, que llegó a ofrecerles hasta 400.000 pesetas, se empecinaron en su regalo que resultó ser un curso de paracaidismo.

Desde luego no es el regalo soñado por los concursantes de «Un, dos, tres...», que siempre van en busca del apartamento o del coche, pero ya que ese fue su premio, Juan Carlos y Diana no dudaron en hacer el curso, ya que tirarse en paracaídas era una de las ilusiones de Diana. La experiencia les resultó muy reconfortante y manifestaron su intención de continuar practicando este deporte de altura.

Desconocemos si la pareja de sufridores hicieron también el curso o prefirieron renunciar a su premio. Ya se sabe que en el «Un, dos, tres...» “si vaca, vaca; y si coche, coche”, pero siempre había posibilidad de renunciar al premio.

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