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¿Cómo se grababa el «Un, dos, tres...»?

 

 

          

          

 

 

 

La grabación de «Un, dos, tres...» no era tarea fácil. La propia complejidad y duración del programa, sumadas al perfeccionismo de Narciso Ibáñez Serrador, hacían que las grabaciones se alargaran hasta altas horas de la madrugada.

 

El propio Jordi Estadella declaró públicamente en una ocasión que aguantar la grabación de un «Un, dos, tres...» tiene melones.

 

Como curiosidad, podemos decir que las grabaciones de «Un, dos, tres... ¡a leer esta vez!» fueron las más rápidas de la historia del concurso. Aun así, se alargaban hasta las doce o la una de la madrugada, cuando el comienzo había tenido lugar a las tres de la tarde. En etapas anteriores, podían durar hasta las dos o tres de la madrugada.

 

En esta sección vamos a intentar describir de la forma más fidedigna posible cómo se desarrollaban aquellas maratonianas grabaciones de «Un, dos, tres...», acompañando los textos con ilustrativas imágenes.

 

 

 

 

 

CAPÍTULO 1

  

Chicho Ibáñez Serrador y todo su equipo de guionistas debían tener preparado el guión del programa antes de la grabación.

 

Todos reunidos en la oficina de Chicho, los domingos se hacía un pase de guión para que todos supieran lo que tenían que decir y, sobretodo, cómo decirlo.

 

La elección de concursantes simpáticos ayudaba a que el programa discurriera mejor.

 

La confección del vestuario de presentadores, azafatas, humoristas, etc. conllevaba un gran trabajo por parte de todo el equipo de sastrería de TVE.

 

El equipo de construcción de decorados ayudaba a recrear el tema de cada programa con cuidadas escenografías.

 

Mientras que los actores ensayan con Chicho en su oficina, el equipo técnico cuida que en el plató no falle nada.

 

«Un, dos, tres... ¡a leer esta vez!» - 2004

 

 

 

CAPÍTULO 2

  

Las azafatas tenían que grabar los playbacks de los números musicales en los que cantaran.

 

El ensayo de las coreografías de los números musicales era una tarea que ocupaba gran parte del tiempo de las azafatas y bailarinas y bailarines. 

 

El «Un, dos, tres...» era un programa tan complejo que requería grabarse en dos jornadas.

 

Gran parte de la primera jornada de grabación se dedicaba al rodaje de los números musicales.

 

Todas las actuaciones que se desarrollaban en el decorado se grababan en la primera jornada.

 

Las entradas de regalos en el decorado o en las puertas laterales del plató también se grababan el primer día de rodaje.

 

En el primer día de grabación también quedaban registradas las transiciones de azafatas, cómicos o artistas invitados del decorado a la zona de las gradas.

 

 

 

 

CAPÍTULO 3

  

A las ocho de la mañana todo el equipo artístico y técnico ya se encontraba reunido en el plató para hacer un ensayo general del programa

 

Terminado el ensayo, los artistas iban a la sala de maquillaje y peluquería para caracterizarse y comenzar a grabar.

 

Antes de comenzar a grabar, había tiempo para compartir un almuerzo y coger fuerzas para la grabación.

 

 

 

 

CAPÍTULO 4

  

Narciso Ibáñez Serrador, en persona, recibía al público en el plató e iba situando a las personas en las gradas.

 

Antes de comenzar el programa, Chicho grababa diversos planos del público riendo por si los necesitaba intercalar posteriormente en post-producción.

 

Aunque su duración en pantalla no excedía de la media hora, la grabación de la tanda de preguntas era la más ardua de todo el programa.

 

«Un, dos, tres...» - 1991

 

 

 

CAPÍTULO 5

  

La grabación de la eliminatoria no presentaba especiales dificultades.

 

Tampoco el juego de consolación planteaba grandes problemas para el desarrollo de la grabación del programa.

 

«Un, dos, tres...» - 1983

 

 

 

CAPÍTULO 6

  

Se intentaba que la grabación de la subasta fuera lo menos interrumpida posible, como si se tratara de un falso directo.

 

Con todo el material bruto obtenido de la grabación, Chicho y todo su equipo de post-producción debían conseguir un programa con ritmo y de no más de dos horas de duración.

 

«Un, dos, tres...» - 1982

 

 

 

LA PRESENCIA CONSTANTE DE CHICHO DURANTE LA GRABACIÓN

  

Chicho no sólo era un realizador que dirigía el programa desde el control, sino que se implicaba personalmente en la grabación y se le veía con frecuencia en el plató.

 

Con los presentadores tenía un contacto permanente, ya que ellos eran los conductores del espacio y sobre los que recaía la responsabilidad de llevar a buen término cada emisión.

 

Las azafatas se llevaban gran parte de la atención (y de las broncas) de Chicho.

 

Descendiente de actores, Chicho era un excelente director de actores.

 

Ya que disfrutaba tanto con los números musicales, Chicho mimaba a los miembros del ballet.

 

Como buen realizador y director, estaba pendiente de cada uno de los miembros de su equipo.

 

En «Un, dos, tres...» no había ningún detalle que no estuviera supervisado por Narciso Ibáñez Serrador.

 

Ibáñez Serrador siempre estuvo muy pendiente de los artistas que acudían como invitados a su programa.

 

Chicho recibía personalmente a los cientos de espectadores que acudían como público a cada grabación.

 

Ya que los concursantes llegaban nerviosos a la grabación, Chicho trataba de calmarlos.

 

El propio Chicho era quien explicaba la mecánica de cada eliminatoria, haciendo una demostración si fuera necesario.

 

Los periodistas que acudían al plató del programa para hacer fotos y escribir sus reportajes eran atentamente tratados por Chicho y todo su equipo.

 

 

 

 

LOS PLATÓS DEL
«UN, DOS, TRES...»

  

Un plató de televisión es un sitio muy caluroso; hasta 50 grados de temperatura pueden alcanzarse en un estudio.

 

El mítico Estudio 1 albergó la grabación de la primera etapa de «Un, dos, tres... responda otra vez» (1972-1973).

 

Los Estudios Roma, sitos en Fuencarral, fueron utilizados para grabar las etapas segunda a quinta.

 

Para la sexta etapa, «Un, dos, tres...» se trasladó de nuevo a Prado del Rey, montando el campamento base en el Estudio 1.

 

En las etapas de los años 90 y en 2004 se tiró la casa por la ventana y el decorado del «Un, dos, tres...» se construyó en el enorme E-3 de los Estudios Buñuel, uno de los más grandes de Europa.

 

«Un, dos, tres...» - 1991

 

 

 

TRUCOS DE LA GRABACIÓN

  

A través del truco del chroma key se podían poner fondos de todo tipo con tan sólo una tela azul.

 

Cada vez que Gloria Trevi acudía a Madrid dejaba grabadas actuaciones para dos programas.

 

La grabación de algunos espacios que no necesitaban de público en pantalla no se grababan necesariamente en el orden en que luego lo veían los telespectadores.

 

 

 

 

ANÉCDOTAS DE LA GRABACIÓN

  

“Mayra Gómez Cassio” era el apodo de Mayra por su prodigiosa memoria, pero a veces también tuvo algún lapsus...

 

Aunque tenía órdenes de tocar la campana sólo cuando se le indicara, una vez se adelantó... ¿Quieres saber qué pasó?

 

Tensión en la grabación del primer programa de la cuarta etapa. Fallaron muchas cosas...

 

Matrimonio bien avenido desde el principio; Alberto Berco y Mayra Gómez Kemp son inseparables, y él siempre acompañaba a ella en todas y cada una de las grabaciones de «Un, dos, tres...».

 

Por aquello de que no se le arrugase el traje, Mayra debía aguantar las largas grabaciones del programa de pie, sin poder sentarse.

 

 

 

 

MISTERIOS Y CURIOSIDADES
DE LA GRABACIÓN

  

¿Por qué se grabó dos veces este programa con diferentes concursantes?

 

¿Por qué Ágatha Lys aparece en los reportajes de prensa sobre el último programa y realmente no interviene en el mismo?

 

¿Qué pasó con las actuaciones de Nicholas Johnson y Lucia Truglia? ¿Y con el eunuco de Arévalo?

 

Se anunció la actuación de Antonio Ozores, pero ¿qué ocurrió al final? ¿Por qué no apareció en el programa?

 

Se grabaron varias actuaciones de “Stage TV”, aunque finalmente sólo se emitió una de ellas.

 

 

 

 

VÍDEOS DE LA
GRABACIÓN

  

¿Queréis ver un vídeo de la grabación del comienzo de la subasta del programa dedicado al mundo del bebé?

 

Hemos puesto un vídeo con la famosa toma falsa en la que Paloma Hurtado se queda con el badajo de la campana en la mano.

 

Hemos colgado el vídeo con el making off de la actuación de “Europe” en el programa dedicado al Antiguo Testamento.

 

En el programa dedicado al Mercado Común, Chicho decidió insertar en el montaje final una toma falsa del humorista Arévalo.

 

Antes de cada número musical del programa dedicado a la comedia musical, pudimos ver cómo trabajaban los tramoyistas, iluminadores, decoradores, sastras, peluqueras y maquilladoras, etc.

 

En el programa dedicado al Tenorio vimos cómo los maquinistas fueron adaptando el decorado a las necesidades de las distintas actuaciones y números musicales.

 

En este vídeo se pueden ver imágenes del plató de la primera etapa de «Un, dos, tres... responda otra vez», con las azafatas, los “Cicutillas”, Kiko Ledgard, Chicho dirigiendo, etc.

 

Gracias a una cámara que estuvo presente en la grabación del programa dedicado a las cuevas de Altamira podemos ver imágenes de cómo se desarrollaba la grabación de un programa de la novena etapa.

 

Mayra Gómez Kemp se dirige al público antes de comenzar la grabación del programa y ensaya con ellos el “Ohhh”.

 

Aunque Mayra tenía sus dudas, Chicho Ibáñez Serrador da por válida una de las respuestas de los concursantes.

 

Una puericultura explica cómo cuidar un bebé para que los concursantes después la imiten en la eliminatoria. Durante la explicación se suceden las interrupciones desde el control de realización.

 

En este vídeo vemos la grabación de la escena del coche con las chicas subidas en él al final del programa.

 

Antes de que las azafatas presenten a los concursantes Irene Foster tiene que ir desde la escalera al podio y colocarse el micrófono.

 

Uno de los invitados del programa dedicado al mundo del bebé fue el hipnotizador Markus; durante su actuación hubo que cortar la grabación varias veces.

 

Aunque lo normal es que en la tanda de preguntas se equivoquen los concursantes, a veces eran “las Tacañonas” las que cometían los errores.

 

En el magacine «La tarde» se emitió un reportaje sobre cómo se grabó el programa dedicado a “Berlín, años 30”.

 

En la grabación del programa dedicado al petróleo Raúl Sénder estaba especialmente nervioso por tener a su madre enferma, y se olvidó en varias ocasiones de su texto.

 

El archivo de TVE ha subido a su web un buen número de vídeos de las grabaciones del «Un, dos, tres...», de varias de sus etapas.

 

 

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